Cuando hablamos de Kodak, enseguida relacionamos la marca con la fotografía pero en los últimos años, primero con el auge de las cámaras digitales y luego con el desarrollo de las cámaras en los teléfonos móviles, su negocio se ha visto muy afectado llegando a solicitar la protección de bancarrota. Ahora con Jeffrey J. Clarke como su nuevo CEO la compañía comienza a explorar otros mercados y presenta en el marco de CES 2015 al Kodak IM5, su primer teléfono inteligente.
Kodak IM5 es un teléfono inteligente basado en el sistema operativo Android (Kit-Kat, pero prometen una actualización a Lollipop) que tiene una pantalla HD de 5 pulgadas, un procesador de ocho núcleos a 1,7 GHz 1GB de memoria RAM, 8GB de memoria interna y una ranura de expansión microSD con soporte para tarjetas de hasta 32GB. Este teléfono de Kodak cuenta con una cámara posterior de 13 megapíxeles con enfoque automático y flash, y una cámara frontal de 5 megapíxeles.
Nada en este dispositivo se diferencia realmente de la competencia, e incluso no es Kodak sino Bullitt Group quien realmente fabrica a este teléfono.
Las únicas características destacadas están del lado del software. El Kodak IM5 tiene una interfaz que permite acceder rápidamente a funciones esenciales como llamadas, mensajes, cámara y contactos. También tiene su propio app store con una variedad de apps seleccionadas a mano además de acceso completo a Google Play.
Un software de administración permite que amigos o familiares de confianza proporcionen ayuda si es necesario a través de una PC o tableta. También viene con un software único de gestión de imágenes que permite a los usuarios editar fotografías de forma rápida, y luego visualizarlas en el dispositivo, compartirlas en las redes sociales o imprimirlas en una impresora hogareña compatible o en servicios de impresión.
El Kodak IM5 se ofrecerá en color blanco o negro y estará disponible en forma global, comenzando por Europa a fines del primer trimestre de 2015.